domingo, 30 de marzo de 2014

Esperando


Y esperando me quedé.


Ayer volvimos al lugar donde divisamos los corzos semanas atrás. Esta vez dispuestos a camuflarnos bien para poder hacer unas fotos cercanas. Así que hicimos uso de la red y nos colocamos justo en los campos donde se reúnen al atardecer. Pues ¿cómo no?, se cumplió la Ley de Murphy. Cuantos más cachibaches y aparejos, menos suerte. Horas de espera y nada. Tanta inactividad a mí me mata, así que me quedé dormida bajo la red. No una vez, sino dos. En el segundo intento también.

 



Los jabalíes contaba no verlos, porque con ese gran olfato, me parecía difícil,  pero contaba con los corzos, últimamente tan "descuidados".


 Foto de archivo en el lugar.

Quizá hayan echado algún producto en los campos para ahuyentarlos y que no se coman los brotes. Porque no creo que fuera nuestra presencia, ya que ni siquiera en los campos lejanos a vista de prismáticos se divisaban. Sin embargo hace unas semanas estaba plagado de animales, jabalí y corzo. No le encuentro explicación (de momento).


Así que de aburrimiento me dediqué a otros menesteres con una antigua cámara bridge que he "heredado", creo que de las primeras que salieron. 



Escarabajo del romero (Chrysomela americana)



Romero (Rosmarinus officinalis)



Araniella cucurbitina
 



Menos mal que los Herrerillos Capuchinos ( Lophophanes cristatus ) me entretuvieron un rato. Andaban de aquí para allá muy activos recogiendo pelusillas. Para el nido, imagino. La Kodak bridge no dió para más, pero ahí queda la foto testimonial.   

¡A ver si la semana que viene hay más suerte!




viernes, 7 de marzo de 2014

Entre corzos

Hace dos fines de semana fuimos a observar cómo va la reproducción de los buitres en un lugar al que nos gusta mucho acercarnos por estas fechas. Muchos nidos ocupados y con los ejemplares parece ser que incubando. Habrá que ir con el telescopio la próxima vez, pues los nidos están lejanos (como debe ser) y apenas se apreciaban con los prismáticos, pero se adivinaba bien que el ciclo de la vida continúa.





No sólo andaban por allí los buitres. También pudimos observar este halcón peregrino (Falco peregrinus) que aún me cuesta distinguir del alcotán a simple vista -gracias a los que me ayudásteis con la identificación en Facebook-, más aún visto desde arriba y no desde abajo como suele ser lo habitual. Aparte de por la mala calidad de la foto -fue lo único que se pudo hacer-, por esa velocidad. Pasó fugaz de ida, a la hora y pico (nunca mejor dicho) de vuelta.



FALCO PEREGRINUS



Eso sí, nos avisó bien de su llegada emitiendo sonidos según pasaba. Verlo cazar tiene que ser increíble. Me parece un ave espectacular. A ver si nos deleita en acción la próxima vez.





Por lo demás día tranquilo. Comenzamos la mañana entre corzos e igualmente acabamos la tarde. Desde un mirador contamos unos once en la lejanía en los campos al atardecer, junto con una familia de jabalíes más lejana aún y el sol escondiéndose. Bonita estampa. A lo largo del dia también nos acompañaron. No sé si porque cada vez son menos cuidadosos, o porque cada vez hay más, o porque nosotros cada vez somos más sigilosos, el caso es que nos dejaron sacar estas imágenes.


 






Eso sí, hasta que se vieron descubiertos. Me pareció precioso este macho con la característica "borra" en sus cuernos. Iba acompañado de dos hembras, que mirando la foto anterior, quizá fueran los que vimos por la mañana.




Por último la vista al cielo y bandadas de grullas que nos vuelven a abandonar.

Como nota ilusionante para mí, ayer primer día soleado y primaveral en el que ya pude observar a los aviones comunes en los bloques de mi barrio inspeccionando sus antiguos nidos. He estado pendiente días atrás, pero nada. ¡Este año se retrasaron un poco más, pero ahí están de nuevo! ¡Spring is here!